A dos semanas de terminar las vacaciones escolares, los maestros y todos los trabajadores del sector educativo se encuentran sumidos en un letargo desesperanzador, por las implicaciones del regreso a clases; producto de la sostenida crisis humanitaria durante los últimos años. Hoy son muchos los maestros que se resisten ante un sistema, que no respeta los valores democráticos, las leyes y la constitución.
Los docentes en Venezuela reciben un salario que no supera los $15 dólares, esta situación impacta de manera negativa a la población estudiantil venezolana ya que por los sueldos precarios los docentes no pueden asistir todos los días a clases e incluso faltan maestros en áreas de aprendizaje determinantes como los son por ejemplo las matemáticas, física, entre otras, arrojando como resultado un horario de contingencia, llamado también mosaico, reduciendo las jornadas de trabajo de dos o tres días a la semana. Esta realidad está latente aunque busque ocultarse haciendo ver una normalidad y en muchos de los casos el Ministerio de Educación en conjunto con el Centro para el Desarrollo de la Calidad Educativa exigen labores acompañadas de amenazas con abrir expedientes administrativos, suspensiones arbitrarias de salarios, entre otros; tal situación contribuye al deterioro de la educación.
Como muestra de la evidencia de políticas educativas desatinadas e incumplimiento de la firma de la contratación colectiva en la actualidad existe un déficit cercano a 200 mil maestros que han abandonado las escuelas de los cuales 97.000 emigraron y otros 100 mil permanecen en el país, según datos de la UCAB, abandonaron las aulas para dedicarse a otros oficios.
Tomando en cuenta que la canasta básica alimentaria oscila entre 587 dólares y en concordancia con la estimación difundida por la UCAB los docentes deberían ganar un promedio de 950 dólares. Por ello en aras de contribuir a la restauración de la nación, desde este espacio sindical seguimos trabajando por la recuperación del salario docente, en este sentido se apoya todas las propuestas que vayan en pro del bienestar de los maestros activos y jubilados del país.
Desde esta instancia se ha denunciado también en reiteradas oportunidades las pésimas condiciones de trabajo; escuelas sin servicios básicos, sin baños, sin pupitres, con filtraciones es lo que prevalece en las escuelas públicas del país. en esta larga diatriba la propuesta de asignar 30% de la recaudación del impuesto del valor agregado (IVA) y del Impuesto de Sucesiones al presupuesto educativo sería una opción digna de evaluar y aplicar. Cabe destacar que dicha propuesta está siendo avalada por organismos educativos como Alianza por la Educación, un proyecto impulsado por Fe y Alegría y la Universidad Metropolitana. Se espera que apliquen los correctivos recomendados y detengan el abandono masivo de maestros, de esta manera la apertura de este año escolar ofrecería un margen de estabilidad del personal docente que redundaría en una subida en la calidad educativa para los niños y jóvenes venezolanos.
Propuesta educativa para emerger
A dos semanas de terminar las vacaciones escolares, los maestros y todos los trabajadores del sector educativo se encuentran sumidos en un letargo desesperanzador, por las implicaciones del regreso a clases; producto de la sostenida crisis humanitaria durante los últimos años. Hoy son muchos los maestros que se resisten ante un sistema, que no respeta los valores democráticos, las leyes y la constitución.
Los docentes en Venezuela reciben un salario que no supera los $15 dólares, esta situación impacta de manera negativa a la población estudiantil venezolana ya que por los sueldos precarios los docentes no pueden asistir todos los días a clases e incluso faltan maestros en áreas de aprendizaje determinantes como los son por ejemplo las matemáticas, física, entre otras, arrojando como resultado un horario de contingencia, llamado también mosaico, reduciendo las jornadas de trabajo de dos o tres días a la semana. Esta realidad está latente aunque busque ocultarse haciendo ver una normalidad y en muchos de los casos el Ministerio de Educación en conjunto con el Centro para el Desarrollo de la Calidad Educativa exigen labores acompañadas de amenazas con abrir expedientes administrativos, suspensiones arbitrarias de salarios, entre otros; tal situación contribuye al deterioro de la educación.
Como muestra de la evidencia de políticas educativas desatinadas e incumplimiento de la firma de la contratación colectiva en la actualidad existe un déficit cercano a 200 mil maestros que han abandonado las escuelas de los cuales 97.000 emigraron y otros 100 mil permanecen en el país, según datos de la UCAB, abandonaron las aulas para dedicarse a otros oficios.
Tomando en cuenta que la canasta básica alimentaria oscila entre 587 dólares y en concordancia con la estimación difundida por la UCAB los docentes deberían ganar un promedio de 950 dólares. Por ello en aras de contribuir a la restauración de la nación, desde este espacio sindical seguimos trabajando por la recuperación del salario docente, en este sentido se apoya todas las propuestas que vayan en pro del bienestar de los maestros activos y jubilados del país.
Desde esta instancia se ha denunciado también en reiteradas oportunidades las pésimas condiciones de trabajo; escuelas sin servicios básicos, sin baños, sin pupitres, con filtraciones es lo que prevalece en las escuelas públicas del país. en esta larga diatriba la propuesta de asignar 30% de la recaudación del impuesto del valor agregado (IVA) y del Impuesto de Sucesiones al presupuesto educativo sería una opción digna de evaluar y aplicar. Cabe destacar que dicha propuesta está siendo avalada por organismos educativos como Alianza por la Educación, un proyecto impulsado por Fe y Alegría y la Universidad Metropolitana. Se espera que apliquen los correctivos recomendados y detengan el abandono masivo de maestros, de esta manera la apertura de este año escolar ofrecería un margen de estabilidad del personal docente que redundaría en una subida en la calidad educativa para los niños y jóvenes venezolanos.